jueves, 5 de noviembre de 2009

World is Mine! Capitulo 3


World is Mine!




Capitulo 3: Nuestra primera canción.

El sol brilló en todo su esplendor aquel día martes y Rin resplandecía en energía. Apenas despertó, se dirigió al lavabo, se bañó, preparó el desayuno y levantó a Len de un solo grito ensordecedor.

-¡¡Len!! –Exclamó con toda su energía-

-¡Kya! ¿Qué…? ¿Qué pasa? –Preguntó aturdido mientras se paraba de la cama de un salto-.

-A desayunar –Dijo con una hermosa sonrisa antes de desaparecer tras la puerta-.

Se veía hermosa, realmente se veía hermosa ante los ojos del chico quién se limito solo a sonreír para luego seguirla hacia el comedor.

-Espero que te guste –Dijo mientras se sentaba y veía como el chico la imitaba-.

-Ittadakimatsu –Agradecieron ambos al unísono antes de empezar a comer-.

-¡Umai! –Exclamó el rubio-. Está muy rico

-No cocino muy a menudo, así que estate agradecido de ser uno de las únicas personas que ha probado mi mano en la cocina –Se alabó-.

-Arigato Rin –Dijo-.

-Jeje, no es nada –La chica sonrió y luego se llevó un bocado de aquel apetitoso desayuno-.

-Rin… -Susurró luego de unos segundos, ensimismado-. Al despertar, pensé que eras el sol gritándome… Te ves resplandeciente hoy…

-¿Eh? –La chica se sonrojo y luego sonrió-. ¿Qué intentas decirme? Nee ¿Len?

-¿Ah? –Preguntó saliendo de un trance, y dándose cuenta de lo que había dicho-. Bueno yo… ¡Nada! N-No fue nada –Respondió nerviosamente mientras bajaba el rostro rojo que parecía un tomate, para luego tomar un poco del jugo de naranja-.

-Eres la primera persona a quien le escucho decir algo tan hermoso para mí –Susurró como recordando su antigua vida-. Gracias Len, por ser tan lindo y especial para mí… Sinceramente, jamás pensé en que alguien a quien yo pudiese querer existiera alguna vez.

-Rin… -Susurró al notar cierto tono melancólico en la chica-.

-¡Bueno! Hoy tendremos a Kaito nii enseñándonos a tocar instrumentos –Exclamó feliz-. Y además hoy compondremos la canción.

-Wow

-Ayer en la noche invente un poco de la letra, pero me faltan tus partes. Ahí veremos como hacerla. Después compondremos la melodía.

-Si que eres talentosa –alabó el chico mientras le sonreía-.

-Estoy segura de que tú también lo eres. –Dijo mientras se paraba de la mesa y retiraba las cosas-. Iré a lavarme los dientes, no puedo esperar para cantar alguna canción mientras toco algún instrumento…

-Digo lo mismo –Dijo mientras se paraba de la mesa y recogía lo que quedaba en ella-. Realmente quiero cantar junto a ella… Su voz es hermosa, y cuando cantamos aquella canción yo… -Pensó-. La canción de nuestros padres…

Pocos minutos bastaron para que los Kagamine se dirigieran a su nueva escuela y además finalmente estaban tranquilos. Tener a compañeros de la agencia en la escuela era una gran ventaja para ambos y de cierto modo, se sentían acogidos…

-¡Ohayo! –Saludó energéticamente la rubia-.

-Oh ¡Ohayo Rin Chan! –Saludo Kasane mientras se acercaba a ellos-. ¿Ya estas mejor?

-Si, muchas gracias –Asintió sonriendo-.

-Ohayo… -Susurró Len-.

-Ohayo Len Kun –Saludo la pelirroja-.

-¿Dónde nos toca clase ahora? –Pregunto Rin-.

-En la sala de instrumentos –Dijo la muchacha-. Yo estaba encargada de hacer el aseo, es por eso que estoy aquí. Ahora me iré al salón. Si quieren vengan conmigo –Dijo antes de cruzar el umbral-. Aunque creo que no será necesario –La chica sonrió y se alejo a paso lento-.

-¡Rin, Len! –Exclamó una voz a sus espaldas-. ¡Ohayo!

-¡Kaito nii! –Exclamarón los rubios al unísono-. ¡Ohayo!

-Vine al salón para guiarlos. Así no se pierden –Dijo sonriente-. ¿Cómo estas Rin chan? Tu vestido…

-No te preocupes, no fue nada –La chica sonrió ampliamente-.

-¡Kaito! –Exclamó una voz chillona-.

-Oh Miku ¿Cómo estas? –Preguntó con la misma sonrisa-.

-Bien, me alegra verte al llegar ¿Viniste por mi?

-En realidad vine por Len y Rin Chan, como son nuevos podían perderse yendo a la sala de instrumentos –Respondió-.

-Oh tienes razón –Dijo con una sonrisa que para los “gemelos” era solo una sonrisa falsa-.

-Kaito ¿Qué instrumento nos enseñaras a tocar? –Preguntó con emoción el chico de ojos azules-.

-Pues hace poco terminamos con la flauta, podríamos comenzar con…

-Guitarra –Dijo Rin con voz de mando-. ¡Por favor Kaito Nii! –Suplicó-.

-Esta bien, con guitarra entonces –Dijo mientras le sonreía ampliamente, a lo que la rubia se sonrojo un poco-. ¿Nos vamos ya? Están por tocar la campana.

-¡Hai! –Exclamarón los chicos de ojos azules antes de comenzar a caminar atrás de Kaito-.

Dieron varias vueltas para encontrar el salón y al entrar, los Kagamine percibieron la presencia de sus demás compañeros quienes ya estaban sentados en sus posiciones, esperando al maestro.

-De pie –Dijo Kasane- Saluden –Ordenó, a lo que todo el alumnado saludo al recién llegado. Luego todos se sentaron y vieron como entraban los Kagamine seguidos por Miku-.

-¡Ohayo Rin Chan! –Se escuchó por parte de los hombres, cosa que disgusto a Len-.

-¡Ohayo Len Kun! –Exclamarón las chicas-.

-Ohayo –Respondieron a dúo y con una sonrisa que incluso podría confundirse con los rayos del sol-.

-¡¡Ohayo Minna!! –Exclamó con su vos chillona la “verde”, a lo que el curso la saludo y luego giraron su atención a los recién llegados-.

-¡Oh! Dell Kun, Ohayo –Saludo Rin, a lo que el chico de mirar carmín se sonrojo un poco-.

-O-Ohayo Rin… Len –Saludo débilmente-.

-¿Podemos sentarnos junto a ti? –Preguntó Len-.

-Claro –Asintió preocupado-. Aunque con lo de ayer…

-¡Oh vamos hombre! –Exclamó energéticamente la chica mientras le daba un gran golpe en la espalda al peliplata, lo que generó gran silencio en el aula-. Ayer no paso nada, no te preocupes. Ya me olvide –Le dijo mientras se sentaba a su lado, para la admiración de las chicas y para el encanto de los hombres-.

-Solo espero que no vuelvas a intentar hacerle daño a Rin… -Susurró Len, algo receloso-.

-Lo siento…

-¡Minna! –Exclamó el maestro, interrumpiendo la conversa y el bullicio que había en el salón de música-. Durante estas semanas practicaremos guitarra por petición de nuestros nuevos compañeros.

-Nee, Kaito Nii… ¿Eso es un piano? –Preguntó Rin, mientras señalaba un bulto envuelto en una gran tela-.

-Oh, claro –Dijo mientras se acercaba al bulto y lo destapaba, dejando ver a un precioso y elegante piano negro-.

-¡Sugoi! –Exclamó el rubio-. Yo jamás había visto a un piano así de cerca. Me he limitado a aprender a usar el órgano de mano…

-Yo en mi casa tengo un piano –Dijo Rin observando el gran y hermoso piano que tenía a la vista-. Pero este es… No sé, se ve diferente. Quizás más hermoso

El aula había quedado en silencio ante el comentario de la rubia, quien yacía ensimismada observando el gran piano.

-¿Rin chan? ¿Sabes tocar algo de piano? –Preguntó curioso el joven de cabellos azules-.

-Si… Algo sé –Susurró apenada, a lo que los chicos del aula reaccionaron con unos cuantos “Woooh” y unos “Kawaii”-.

-¡Rin! ¿Por qué no nos tocas algo? –Preguntó la chica de cabellos verdes-.

-¡¿Eh?! –Exclamó, jamás había tocado piano frente a alguien, además de a su madre-. Yo no…

-Rin, por favor –Le suplico Len con mirada de borrego, cosa que la rubia no pudo resistir y se limitó a suspirar-.

-Está bien, pero solo porque Len me lo ha pedido… -Respondió parándose bruscamente de su silla para dirigirse hacia el piano-.

-Rin, no estés nerviosa, sé que lo harás bien –Le dijo Kaito al oído segundos antes de que la chica se sentara-.

-Esta bien… Aquí vamos –susurró para sí misma, intentando darse calma-.

La muchacha comenzó a tocar el piano con majestuosa delicadeza, generando una atmosfera hermosa y tranquilizadora en el aula. Rin se veía hermosa tocando piano, y los rayos del sol que se filtraban por las cortinas blancas del salón, la hacían parecer como un ángel a la vista de los allí presentes.

Ciertamente Rin estaba nerviosa, y no sabia que tocar, por lo que decidió improvisar un poco hasta que recordó la canción que le tocaba a su madre cuando ésta se lo pedía. Haru yo Koi de Yumi Matsutoya… Era una melodía bastante nostálgica y hermosa.

-Rin… -Susurró Len observando la melancolía que se desprendía de los ojos de la chica rubia-. Esta canción la conozco… -Susurró antes de pararse para comenzar a cantar-. De esta manera Rin ganará más confianza –Pensó sonrojado, más antes de ponerse nervioso, la voz de Rin le acompañó-.

Awaki hikari tatsu niwakaame

(Una fugaz luz se detiene en la lluvia),

omokage no jin'chouge

(Hermosas daphnes),

Afururu namida no tsubomi kara

(Formadas por las yemas de mis lágrimas),

Hitotsu hitotsu kaori hajimeru

(Una por una empezaron a soltar su fragancia),

Sore wa sore wa sora wo koete

(Está, está más allá del cielo),

Yagate yagate mukae ni kuru

(Mucho antes, mucho antes de que nos conociéramos)

Ambos se miraron con una enorme sonrisa y prosiguieron

Haru yo tooki haru yo

(La primavera, la lejana primavera),

mabuta tojireba soko ni

(Si cierro los ojos, aquí estás),

Ai wo kureshi kimi no

(El que me da amor),

natsukashiki koe ga suru

(Tu anhelada voz suena)

-Estos chicos ciertamente tienen un don para la música –Pensó con una sonrisa el joven de cabellos azules, antes de encaminarse hacía un xilófono que había en el aula, y comenzar a seguir el compas de la canción, mientras esperaba que el primer coro finalizara para comenzar a cantar con ellos-.

-Mi corazón late a mil por hora, es la primera vez que me divierto tanto… -Pensó Rin, sin dejar de tocar el piano y a la vez, escuchando el xilófono que Kaito había comenzado a tocar antes de que comenzara la siguiente estrofa-. Arigato Len, Kaito nii

-Rin… -Pensó mientras se encaminaba hacia ella y quedaba frente al piano, observándola-. Cantar juntos es lo que mas deseaba hacer… -Pensó antes de comenzar nuevamente el canto junto a Rin y a Kaito-.

Kimi ni azukeshi waga kokoro wa

(Mi corazón, aquel que te di),

Ima demo hen'ji wo matte imasu

(Aún sigue esperando una respuesta),

Dore hodo tsukihi ga nagarete mo

(No importa cuanto tenga que esperar),

Zutto zutto matte imasu

esperaré, esperaré no importa qué),

Sore wa sore wa asu wo koete

(Está, está más allá del mañana),

Itsuka itsuka kitto todoku

(algún día, algún día lo alcanzaré),

Haru yo mada minu haru

(La primavera, una primavera que aún no he visto),

mayoi tachidomaru toki

(Cuando empiezo a dudar y me detengo),

Yume wo kureshi kimi no

(Tu mirada, tu mirada me hace soñar),

manazashi ga kata wo daku

(Y abraza mis hombros),

Yume yo asaki yume yo watashi wa koko ni imasu

(Los sueños son simples sueños),

Kimi wo omoinagara hitori aruite imasu

(Estoy aquí pensando en tí, caminando sola),

Nagaruru ame no gotoku nagaruru hana no gotoku

(Como la lluvia que fluye, como las flores que fluyen).

Haru yo tooki haru yo

(La primavera, la lejana primavera),

mabuta tojireba soko ni

(Si cierro los ojos, aquí estás),

Ai wo kureshi kimi no

(El que me da amor),

natsukashiki koe ga suru

(Tu anhelada voz suena).

Haru yo mada minu haru

(La primavera, una primavera que aún no he visto),

mayoi tachidomaru toki

(Cuando empiezo a dudar y me detengo),

Yume wo kureshi kimi no

(Tu mirada, tu mirada me hace soñar),

manazashi ga kata wo daku

(Y abraza mis hombros)

El trió de voces calló y la melodía continuó hasta su fin. El aula que había permanecido en silencio, comenzó a aplaudir con entusiasmo a sus nuevos compañeros. Luego, Rin se levantó de su asiento y se dirigió a sus compañeros.

-Arigato… -Agradeció Rin con las mejillas sonrojadas mientras una sonrisa amena y hermosa se le dibujaba en el rostro-. Realmente les agradezco mucho este momento, gracias por habernos escuchado a Len y a mí. También gracias a ti Kaito Nii –La chica se giro un poco para observarle-. Cantas muy hermoso y eres un músico excelente.

-Digo lo mismo de ustedes dos –El joven sonrió, se acercó a ambos chicos rubios y les desordenó el cabello con dulzura-. Realmente serán de los mejores.

-Gracias Kaito Nii –Dijeron ambos al mismo tiempo, antes de dirigirse hacia sus asientos-.

-F-Felicidades… -susurró Dell-. Hacen un buen dúo, no me extraña que Gakupo los haya elegido –Dijo sonrojado, mas sin perder aquel semblante serio que lo caracterizaba-.

-Me alegra saber que te ha gustado Dell –Dijo Rin con una enorme sonrisa-.

-Yo… -Intentó decir el joven-.

-¡Me han sorprendido! –Exclamó la terrible y chillona voz de Miku interrumpiendo el momento-. ¡Han estado fenomenales!

-¡No grites! Lastimas mis oídos –Se quejó Rin-.

-Oh, lo siento…

-Bien, creo que ya es hora de comenzar la clase ¿No es así chicos? –Preguntó Kaito con su típica sonrisa serena-.

-¡Claro!

Y de esta manera, la clase comenzó y se llenó de acordes melódicos al son de las guitarras. Len al parecer era experto, tocaba muy bien y muy rápido. Por otro lado Rin se había olvidado de las notas y no podía progresar.

-¡Maldita guitarra! –Exclamó furiosa a punto de tomarla y romperla en mil pedazos-

-Rin, haber ¿No recuerdas las notas? –Preguntó Len un poco preocupado por la actitud de su doble-.

-Len, ayúdame –Suplico- No lo recuerdo, hace tiempo que no toco una guitarra

-Tranquila –Dijo serenamente mientras dejaba de lado su guitarra y se acercaba más a la joven-.

Era hermoso, su sonrisa su mirar… No es que fuese vanidosa ni nada, es que a pesar de ser iguales, su forma de mirar y su sonrisa eran diferentes a las suyas. De pronto, sintió su corazón acelerar y sus mejillas se tornaros carmesí ¿Pero qué era lo que estaba pensando? Len era…

-¿Rin? ¡¿Rin?! –Llamó insistente, sacando a la muchacha de sus pensamientos-.

-¿Ah? ¿Qué? –Preguntó bajando un poco el rostro-

-Préstame atención –Le exigió mientras se ponía tras ella y le guiaba la mano izquierda a las cuerdas-

Una a una, le fue enseñando las notas de la guitarra. Estaban tan cerca el uno del otro, tan cerca que podían oler el aroma del otro y sentir la respiración profunda y nerviosa de cada uno. El contacto era suave, era extremadamente suave.

Y así el tiempo pasó y la clase terminó de un abrir y cerrar de ojos.

-Kagamine Chan, Kagamine Kun, felicidades –Dijo una chica que encabezaba a los demás compañeros-. Cantan muy bonito, sean muy bienvenidos a la academia.

-Muchas gracias –Dijeron ambos-. Es un placer conocerlos a todos ustedes.

-Soy Monone Momo, mucho gusto –Saludo con ternura-.

-Ne nee Rin Chan –Interrumpió un chico mientras se le acercaba junto a la mayoría de sus compañeros-. ¿Tienes novio?

-No –Respondió con frialdad-.

-¡¿Pero cómo?! –Exclamaron varios de sus compañeros hombres-.

-Pero que extraño, eres muy linda como para no tener pareja –Dijo otro acercándosele con cara de baboso-.

-No he encontrado a nadie que me soporte jeje –Rio nerviosamente-.

-¿Y tu gemelo tiene novia? –Pregunto una chica de repente-.

-¿Len…? –Susurró-.

-¿Yo? -Preguntó como no entendiendo que se referían a él. Habían usado la palabra gemelo y él no…- ¡Qué no somos gemelos! Nos conocimos ante ayer –Aclaró un poco molesto-. Y no, no tengo novia tampoco.

-¿Qué se conocieron ayer? ¡Pero si son igualitos! –Exclamó Momo, dejando de lado el tema de las novias-.

-Pues así son las cosas… -Ambos suspiraron-.

-Ohh, ¿y hay lago que les guste?

-Las aplanadoras, los plátanos, las naranjas… -Dijeron al unísono con cara tierna-. ¡Oye! ¡Deja de decir lo mismo que yo!

-¡Que lindos! Y que sincronización –Exclamarón todos-.

- Les gusta lo mismo y son igualitos, pero no son gemelos… ¿Entonces eso significa que ustedes llegaran a ser novios? Siempre están juntos y Miku Chan menciono que también viven en el mismo departamento –Dijo Momo con despreocupación logrando una exclamación de sorpresa por parte del aula-.

-¿N-Novios…? –Ambos se sonrojaron al extremo-. ¡Por supuesto que no!

-¿Entonces Len con Miku y Rin con Dell? –Preguntó otra chica-.

-¡Que no!

El aula estalló en risas ante las graciosas caras de Rin y Len. Estaban sonrojados a más no dar, se notaba que no estaban acostumbrados a hablar de ese tipo de cosas… sin embargo de pronto…

-¡¡Cuidado!! –Exclamó la voz chillona de Miku tras los rubios-.

-¡Kya! –Exclamó Rin al ver la pila de instrumentos musicales que se le venían encima-.

-¡¡Rin!! –Exclamó Len, quien se paró para intentar rescatarla… Sin embargo, alguien se le adelanto-.

-¡¡Abunai!! –Exclamó el joven de cabellos plateados mientras se lanzaba encima de la rubia y abrazándola se tiró al suelo para alejarla del peligro-.

-Itte… -Se quejó la rubia mientras se sobaba una pierna-. ¡Dell! ¿Estás bien? –Preguntó preocupada-.

-¿Tú como estas…? –Preguntó preocupado, antes de darse cuenta de que su nariz chocaba con la de la muchacha a quien tenía entre sus brazos-. ¡Kya! ¡Gomen! –El joven se sentó y observó la pila de instrumentos que había esparcidos por el suelo, para luego mirar con odio a la causante de aquel desastre-. ¡Escúchame tonta! Aprende a tener más cuidado, casi lastimas a Rin –Exclamó enfadado mientras se paraba y se acercaba amenazante a la chica verde-.

-L-Lo siento, fue un accidente…

-Esta niña en realidad me causa una cólera de mil demonios… -Pensó con rabia la chica de mirar azul profundo mientras se paraba del suelo con ayuda de Len-.

-¿Estas bien Rin…? –Preguntó preocupado, tanto por el porrazo como por el roce que había habido entre ella y el alvino de ojos rojos-. ¿No te hizo nada?

-No te preocupes, solo estoy un poco adolorida.

-Miku, Dell tiene razón, aprende a tener mas cuidado, ¡ya van dos veces! –Reclamó Len enfadado. No solo no había podido proteger a Rin, si no que Dell se le había adelantado y casi…-.

-¡Lo siento! –Exclamó antes de salir corriendo mientras sollozaba-.

Sinceramente no había nada que hacer con esa niña de pelo color pasto. Es como si estuviera tratando de matar a la pobre de Rin… Estaba preocupado por ella, no quería que nada le pasara a su compañera de departamento y de canto. Definitivamente la quería mucho…

-Se han pasado un poco –Dijo Rin aparentando preocupación-. Aunque sí, tienen razón. ¡Miku Casi me mata!

-Déjala que llore un poco. Así pensara bien las cosas que ha estado haciendo –Dijo fríamente Dell mientras pasaba a su lado y seguía caminando sin verla. Sin embargo Rin le tomo de la mano y lo obligo a girarse-.

-Gracias Dell… -Y sin más, le dio un fugaz beso en la mejilla al muchacho. Estaba acostumbrada a agradecer ese tipo de cosas de esa manera, ya que cuando pequeña había vivido en el extranjero y allí las cosas eran mas espontaneas que en el Japón-.

-¡¡Rin!! –Exclamó Len tomándola por el brazo un tanto enfadado- ¡¿Cómo se te ocurre hacer algo como eso aquí?!

-¿Qué tiene de malo? Me salvo la vida ¿No? –Dijo naturalmente, sin notar el rubor que Dell tenía en sus mejillas, por lo que decidió huir de allí corriendo-

-Me acaba de besar… Y ayer ella y yo estábamos a punto de matarnos mutuamente. Mi corazón… -El joven alvino se detuvo al llegar al patio y se apoyó en uno de los cerezos que tenía próximo-. ¿Qué demonios me está pasando?

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Len seguía regañando a la rubia. ¡No podía creer la osadía de esta! ¡¿Cómo pudo besar a ese tipejo que nada más ayer estuvo a punto de devorársela?! Además la envidia le recorría el cuerpo y le sacudía el corazón…

-Pero Rin…

-Ya te dije que no le tomes importancia idiota –Dijo ya cansada-.

-¡Es como si Dell te gustara! –Exclamó ya sacando toda su rabia del interior de su alma-

-¿Y eso a que viene? ¡Eres un tonto! –Enfadada a más no dar, la rubia le dio una bofetada a su doble masculino y salió corriendo hacia el patio, justo al momento cuando tocaban la campana para entrar a clases-.

-¡¡Rin!! –Exclamó preocupado-. ¡¡Demonios!!

-¿Len? ¿Dónde esta Rin? –Preguntó Miku a sus espaldas-.

-Ella… Se ha enojado conmigo.

-Lo siento, creo que es mi culpa. No pudiste defenderla de mi estupidez y…

-No Miku, no fue culpa tuya, no te preocupes –Dijo Len sin dejar de mirar el pasillo por el cual la chica había desaparecido-.

-Tienes la mejilla colorada. ¿Rin te golpeo? –Preguntó mientras tocaba con suavidad la mejilla del rubio-.

-No es nada, iré a por ella… -Y dicho esto, salió corriendo en busca de su muy querida Rin-.

¡Es un idiota!

Realmente era un idiota… ¿Cómo pudo decirle algo así…? Ella enamorada deDell, si claro. Tanta rabia tenía que había escalado un cerezo y tenía pensado quedarse ahí hasta que terminaran las clases.

-¡Rin! ¡¿Dónde estas Rin?! –Exclamó una voz abajo del árbol-.

-¿Qué quieres idiota? –Gritó desde el árbol de forma fría, haciendo que el chico rubio elevara su mirar azulino-

-¡Perdóname Rin! No quería hacerte sentir mal… -El joven la miro con cara de suplica y las mejillas sonrojadas, a lo que la chica salto de lo alto del árbol y cayó derechísima en el suelo, sorprendiendo a Len-. Rin…

-¡Eres un tonto! –Le gritó en la cara-.

-¿Y que querías que hiciera? ¡Me sentí impotente al no poder ayudarte! Y además… ese beso hubiese sido para mí –Murmuró casi inaudiblemente, pero la joven le escucho claramente-.

-¿Estas celoso…? –Preguntó anonadada y con los ojos abiertos como platos-.

-¿Eh? ¡No! No es eso, es que yo… -Intentó excusarse, mas no pudo continuar pues la chica ya le había dado un dulce beso en la comisura de los labios-. Rin… -Susurró apenas con los ojos entrecerrados-.

-V-Vamos a clases idiota… -Dijo comenzando a caminar con el rostro oculto tras su flequillo-.

¡Eso estuvo muy cerca! Sus labios casi se juntaban en aquel fugaz beso que Rin le había dado, si tan solo el se hubiese movido unos centímetros...

-¿Pero en qué estas pensando Len…? –Se dijo así mismo-.

El día paso absorto de problemas hasta que las clases terminaron y los Kagamine comenzaron a dirigirse hacia su departamento.

-Rin… -Susurró débilmente el joven. No habían hablado durante toda la tarde, así que se sentía demasiado nervioso-.

-¡Al fin termino el colegio! –Exclamó feliz la rubia-.Ahora vayamos a la agencia antes de ir a los departamentos. Hay unas cosas que quiero consultarle a Gakupo

-¿No estas siendo muy descortés con Gakupo San? –Preguntó Len un poco preocupado-.

-Nah, Gakupo ahora es mi tutor, y pudo llamarlo como quiera

-Oh bueno…

Y así, ambos se dirigieron a la oficina del señor Gakupo, quien los recibió con fascinación.

-¿Qué tal su segundo día de escuela muchachos? –Preguntó con una hermosa sonrisa-.

-¡Pues genial! –Exclamo Rin-. Solo que casi muero por culpa de Miku, me quería enterrar bajo a miles de instrumentos.

-Esa niña torpe –Dijo con una gota en la cabeza y una sonrisa forzada-.

-Gakupo, estamos aquí porque quiero preguntarte una cosa. ¿Cada uno aquí en la agencia tiene su propio staf? Me gustaría hablar con el staf que nos corresponde a nosotros, y pedir que no sea el mismo que el de Miku

-¿Ya tienen una canción?

-La estamos componiendo –Aseguro Rin con una sonrisa-.

-¡Perfecto! ¡Qué emoción! –Dijo con lagrimitas en los ojos-. ¡Los conduciré de inmediato a su staf! Cada uno de ustedes tiene su propio staf, así que no te preocupes, no compartirás un staf con Miku…

-¡Qué bien! –La emoción le recorría el cuerpo, al fin su creación vería la luz en unos cuantos días-.

-Pero antes, quiero mostrarle unas cosas –Dijo con una sonrisa de oreja a oreja-. Acérquense

Curiosos, los Kagamine se acercaron a su nuevo tutor y a su notebook, llevándose una gran y extraña sorpresa.

-¿Qué hacemos nosotros allí? –Preguntaron ambos con sorpresa-.

-Como verán, ya se ha filtrado información de que han ingresado nuevos integrantes a Vocaloid.

-¿NicoNico…? –Preguntó Len mientras leía el Avatar de la página-.

-Si, NicoNico es una página web en donde los fans de Vocaloid suben comentarios acerca de sus cantantes favoritos, discuten sobre las canciones nuevas y suben los videos de sus cantantes favoritos.

-Sugoi, ¿y ya estamos allí? –Preguntó Rin casi incrédula-.

-Si, y al parecer los han investigado un poco. He de suponer que algunos fans de Vocaloid asisten a clases con ustedes

-¡¡Que no soy un Chico Shotta!! –Exclamó Len leyendo la entrada en donde había una foto de él y un poco de información-.

-Tranquilo Len… -Dijo Rin-.

-Nuestros fans están impacientes, quieren ver ya su actuación –Dijo Gakupo con una gran sonrisa-. Bueno, ahora a lo que vinieron. Si me siguen podremos llegar donde su staf

-Ok –asintieron ambos-.

Y de esta manera, Los Kagamine junto a Gakupo se encaminaron a los diferentes estudios de grabación y se introdujeron al salón 02.

-¡Konishiwa minna! –Exclamó Gakupo- He aquí a sus artistas

-¡Al fin! –Exclamó una mujer de cabellos castaños y muy pero muy largos-. Pensé que no los veríamos hasta la semana entrante…

-Es que verán, Rin Dono ha pedido conocerlos porque ya tiene ideas para su primera canción y quería hablar con ustedes –Argumentó Gakupo-.

-Oh ya veo –Dijo el hombre que acompañaba a la mujer, al parecer ambos tenían la misma edad, unos 30 o 35 años-. Mucho gusto, soy Namura Akihiko y ella es Kimura Kaori. Somos los presidentes de vuestro staf.

-Esperamos que logremos llevarnos bien y trabajar sacando todo lo nuestro al máximo –Agrego la mujer de mirar apacible-.

-Mucho gusto, somos los Kagamine –Dijeron ambos al unisonó-.

-¡Soy Rin!

-¡Y yo Len!

-Y bien, yo me retiro –Dijo divertido el hombre de cabellera morada, ante la presentación de los “gemelos”- Tengo cosas que hacer –Concluyó antes de comenzar a salir por la puerta-. ¡Pórtense bien!

-¡Por supuesto! –Dijeron los chicos mientras veían como la puerta se cerraba-.

-Y cuéntenos ¿Cuál es vuestra idea? –Preguntó el hombre de cabellos negros-.

-Pues verán –Comenzó Rin-. La idea de la canción es hacer como una introducción a nuestro legado en Vocaloid y con ella, dejar en claro que sobrepasaremos a Hatsune Miku.

-¿Con que Miku eh? –Dijo la mujer-. ¿Rivalidad quizás?

-¡Mas que eso! ¡Ha intentado matarme! Hoy casi me entierra bajo a miles de instrumentos musicales que llevaba en sus manos.

-Pues si eso quieren lo haremos –Dijeron ambos al unísono-

-¿De verdad? –Preguntó ilusionada la rubia-

-¡Por supuesto! Además Miku San… No nos agrada mucho tampoco

-¡Genial! Entonces vendremos mañana con la canción ya terminada –Aseguró Rin-.

-Los estaremos esperando con ansias –Dijeron ambos- Les avisaremos a los demás miembros del staf

-¡Ok! Entonces nos vemos –Dijo Rin jalando a Len de la mano y dirigiéndose a la puerta-

-Bye bye

-¡Bye Nii! –Se despidieron ambos-

Ambos salieron disparados hacia el departamento. Rin corriendo y Len siendo jalado por ella.

-¡Rin! ¿Por qué tanta emoción? –Pregunto cansado mientras entraba al departamento seguido de Rin quien cerró la puerta-.

-Siéntate, traeré mi avance –Dijo mientras salía corriendo hacia su habitación a buscar el cuadernillo en donde había anotado la canción-.

-¡¡Rin…!! –Exclamó ya sentado, a lo que la joven llego corriendo y se sentó a su lado-.

-Bien, esto es lo que llevo. Tengo pensado en que sea como una especie de Rap ¿Qué te parece? –Le pregunto extendiéndole el cuadernillo al chico de ojos azules-.

-¡Sugoi! Esta muy buena –Dijo Len sorprendido-

-La letra esta en la pagina siguiente –Le señaló-. Ya había pensado yo que tendríamos un staf para ambos, así que el coro va así –Dijo antes de comenzar a tararear lo que pronto seria una gran canción-. Sora ikuzo!! Gekokujou!! (Aquí vamos Revolución!) Kokoni tsudoe warera Kagamine ikka (A la familia Kagamine debemos unirnos)…

-Me encanta… ¡Oh! Ya se me ocurrieron las estrofas que faltan, y con los compas que ya hiciste para ellas quedara perfecta.

-¿Enserió? ¡Pues a trabajar entonces! –Exclamó con felicidad- Yo terminare de hacer mi parte.

La tarde se les esfumó de entre un abrir y cerrar de ojos. Habían estado toda la tarde trabajando en la canción y ni siquiera habían cenado, al menos, al unir cada parte, solo debieron cambiar algunos conectores y palabras por sinónimos para que encajaran bien.

-¡Yatta! –Exclamarón ambos al unísono mientras brincaban de la silla-.

-Lo logramos Len –Dijo la chica de ojos color zafiro con una sonrisa de orea a oreja-.

-¡Si Rin! Fue difícil pero…

-Lo logramos –Concluyó la rubia-. ¡¡Len!! –Exclamó mientras se abalanzaba a los brazos de su doble-.

-¡R-Rin! –Exclamó nervioso sin poder reaccionar-. Rin… -Susurró devolviendo el abrazo con dulzura-.

-Mañana iremos a la disquera y prepararemos todo para el lanzamiento de esta canción

-¡Si! –Exclamó entusiasmado-. Será un éxito, estoy seguro…

-Len… -Susurró con nerviosismo. Len la estaba apretando con una dulzura y fuerza increíbles, tanto así que ni siquiera podía moverse-.

-Dime –Preguntó aún con la emoción brillándole en sus ojos color zafiro-.

Sus miradas se cruzaron por unos instantes y ambos se perdieron en el zafiro del otro… No lograban moverse y sus corazones galopaban a gran velocidad, era realmente un momento mágico…

-C-Creo que i-iré a acostarme –Tartamudeó Len rompiendo la armonía del momento. Si bien era cierto que se sentía muy a gusto, la posibilidad de que cayera en un error era muy grande, por lo que prefería escapar antes de destruir la relación que tenía con su nueva amiga-.

-¡Buenas noches! –Exclamó felizmente- Nos vemos mañana

-Si… -Y dicho esto, se encerró en su habitación-.

¡Pero qué día!

Habían pasado muchas cosas otra vez y ambos estaban cansados de tanto labrar, además de que ni siquiera habían comido. El cansancio los había destrozado ya demasiado y solo necesitaban reponer fuerzas miente unas buenas horas de sueño.

Al día siguiente, fue el turno de Len levantarse temprano y hacer el desayuno y es que tenía un hambre…

-¿Rin? –Llamó golpeando a la puerta antes de entrar por ella a la habitación de la joven-. Rin, despierta Rin –Susurró con suavidad mientras la zamarreaba un poco-.

-¿Q-Qué pasa…? –Murmuró abriendo de apoco sus ojos-. ¿L-Len…?

-Esta servido el desayudo –Le sonrió con dulzura. Se veía bellísima con el cabello desparramado-.

-Gracias Len… -Susurró mientras se sentaba en la cama y buscaba sus pantuflas y al mismo tiempo, restregaba sus ojitos azules-. Te queda bien ese delantal rosa –La chico sonrió finalmente con cierta gracia en sus ojos aún medio dormido-.

-Ve a cambiarte y a lavarte esa cara –Le regaño Len-.

-Ya voy, ya voy

Fue una mañana normal y el día comenzó excelente, además que ambos chicos habían hecho algunos “amigos” en su aula y por primera vez se sentían cómodos en algún lugar. Bueno, se sintieron cómodos hasta que llego la hora de ciencias con el profesor Shion Akaito

-Buenos días mis hermosas princesas y horribles sapos –Dijo muy galán el hombre de rojo-.

-¡Buenos días Akaito Sensei! –Exclamaron todos a coro, bueno, todos menos algunos chicos a los cuales les molestaba la presencia de aquel antipático profesor-.

-¡¡Oh pero que tenemos aquí!! –Exclamó mientras daba una majestuosa vuelta y con dos rosas rojas en ambas manos se aproximo a los Kagamine- Qué hermosas hermanitas –Dijo mientras les tendía una rosa a cada uno-.

Las risas por parte de los chicos del salón no cesaron, realmente Akaito Sensei había dicho prácticamente que “Len era una chica”.

-Son hermosas continuo –Mientras a ambos les acariciaba una mejilla-. ¡Y tan aterciopeladas! ¡Creo que me he enamorado!

-Etto… Disculpe Akaito Sensei… -Murmuró apenas Len, definitivamente esta vez se habían pasado-.

-Dime hermosura

Ese comentario si que terminó por sacar al salón de control, e incluso Rin se reía con ganas… ¿Por qué a él?

-Sensei Baka yo ¡Soy un chico! –Exclamó sonrojado a más no dar y con la rabia calándole los huesos-.

-¿Un chico? –El joven de rojo sintió como una piedra le caía encima seguido de un balde de agua fría y terminan do por una estampida de animales salvajes sin control-. ¡Me he enamorado de un chico! –Exclamó mientras se escuchaba una música dramática de ambiente-. Pero es que sus ojos… su mirar

Finalmente, en eso se fue la clase de ciencias, el profesor con complejo de homosexual, Len enfurecido y sonrojado por la vergüenza y Rin junto a todo el resto de la clase muertos de la risa…

-¡Ah~! Al menos ya terminaron las clases –Suspiró cansado-.

-Si que enamoraste al profesor de ciencias –Se burló Rin rompiendo en risas de nuevo-. ¡Pero que melodramático!

-¡Ah ya cállate! –Exclamó enfadado mientras hinchaba sus cachetes y una venita le resaltaba en la frente-.

-Jajaja, vas a tener que andar con cuidado, las chicas me dijeron que Akaito Sensei siempre hace proposiciones indecorosas. Si no te cuidas jugara a la anatomía contigo.

-¡Rin! ¡No digas eso! –Reclamó avergonzado-.

-Jajaja –Ya no lo soportaba, moriría ahí ¡y de la risa!-.

-Pero bueno, es obvio que n va a querer jugar esos juegos con alguien como tú, eres una tabla de planchar –Dijo socarronamente y con una mueca de victoria en el rostro-.

-¡¿Qué dijiste?! –Oh, oh… El aura maligna de Rin comenzó a aumentar-.

-¡R-Rin…!

-¡Jamás te burles de mis pechos! –Y dicho esto, saltó encima de una aplanadora que había en un camino en construcción y comenzó a perseguir al pobre chico intentando aplastarlo-.

-¡¡Perdóname Rin!! –Exclamó sin parar de correr- ¡No quiero quedar igual de plano que tú!

-¡¡Len!! –Exclamó eufóricamente mientras aumentaba la marcha de la aplanadora-.

Y así se la llevaron hasta que llegaron al estudio Vocaloid, en donde la nueva canción de la agencia, comenzaría a ser grabada.

-Lo siento de verdad –Se disculpo con una gota en la cabeza-.

-Hum –Evitó corriendo su cabeza y con las mejillas hinchadas-.

-Rin, onegai –Suplico mirándola con cara de arrepentimiento-.

-¡Arrodíllate ante mi y suplica tu perdón! –Impuso enfadada, a lo que el joven se hincó en el suelo y tomo la mano de la chica de ojos azules-.

-Hime San, ¿podría usted perdonarme? –Preguntó antes de besar con dulzura la mano de la chica quien se sonrojo a más no dar-.

-E-esta bien, te perdono Len –Y dicho esto comenzó a caminar-.

De esta forma, ambos llegaron al sector de grabado 02 en donde un gran staf los estaba esperando.

-¡Bienvenidos Kagamine Rin Chan, Kagamine Len Kun! –Exclamarón todos con emoción al verlos entrar-.

-¡¡Hola mucho gusto!! –Exclamarón ambos felices de tal recibimiento-.

-¿Ya han culminado la canción?

-¡Si! –Exclamó Rin mientras de su bolso extraía una pila de hojas- Aquí esta

Namura Akihiko tomó la pila de papeles con expectación y comenzó a hojearlos uno por uno con emoción. Su felicidad fue tal, que tuvo que sentarse y tomarse la frente con una mano.

-¡Es perfecta! –Exclamó entusiasta-. Miren chicos –Dijo mientras se acercaba a los músicos, quienes al leer la pauta de la melodía, comenzaron a cabecear y a tararear la melodía con felicidad-.

-Será un gran excito –Dijo Kimura Kaori con convicción-.

-¡Entonces comencemos a trabajar! –Impuso el hombre de cabellos oscuros- Pero antes, debemos presentarlos. Rin Chan, Len Kun, estos tres son los diseñadores de vestuario y maquillaje –Dijo señalando a dos hombres y una mujer-. Son Ruri Chan, Jou Kun, y Yamino Kun

-Es un placer trabajar con ustedes –Dijeron los tres al unísono-.

-Estos son los músicos –Dijo Kaori-. Arata Kun, Eijiro San, Gennosuke, Hiraki Chan, Utako Chan y Setsuko Sama

-Mucho gusto pequeños Kagamine –Dijeron al mismo tiempo los tres hombres y las tres mujeres que correspondían al grupo musical del staf-.

-Y finalmente, Kaori, Isamu Kun, Hiobe San, Yoshi Chan y yo somos los diseñadores gráficos, de escenografía y coreografía. –Dijo Akihiko-. Será divertido trabajar con ustedes.

-¡¡Muchas gracias!! –Exclamarón con alegría-.

-¿Y qué tal si empezamos a trabajar con la melodía de una vez? –Propuso el músico mas joven, que tenía el cabello teñido entre rojo y negro-.

-Arata Kun tiene razón –Dijo Hikari, una chica de mediana estatura y el cabello negro con mechones azules-.

-¡Si! –Exclamó el resto-.

El comienzo siempre es lo más agradable, la inspiración vuela por los aires y todo sale a la perfección. Definitivamente esa canción se venía con todo el power del mundo.

El trabajo era arduo y cansador, tanto como para el staf como para los Kagamine, mas sin embargo, todos estaban ensimismados ante el trabajo y todos cooperaban con entusiasmo. Los del vestuario buscaban y rebuscaban un atuendo adecuado para la primera canción, los del diseño gráfico organizaban la ambientación y los movimientos y posiciones que deberían adoptar los Kagamine en el video del single y los músicos intentaban poner en armonía el bajo, el teclado, la batería y la guitarra

-¡¡Si la guitarra así!! Saltadito –exclamó con entusiasmo la rubia-.

-Es una melodía interesante –Resalto el guitarrista de cabellos marrones y largos llamado Gennosuke-.

-Si, y me gusta esta parte de “Ok midori wa teki da” (La de verde es enemiga) –Agrego Utako Chan-.

-¿Si? También es mi parte favorita –Dijo Rin con emoción-.

Si, y así se la llevaron toda la tarde y casi una semana completa, arreglando errores, armonizando las voces con los instrumentos, buscando vestuario y un escenario adecuado para el video; para luego comenzar con las grabaciones de la tan anhelada canción y culminar con la grabación del film del single.

-¡¡Hemos terminado!! –Exclamó todo el staf junto a los Kagamine y a Gakupo, quien estaba de invitado en la pequeña cena que habían organizado tras tres semanas de arduo trabajo y cansancio-. ¡¡Kampai!! (Salud, brindis)

-Me sorprenden, realmente hacen que no me arrepienta de haberlos elegido de entre muchos –Dijo Gakupo con felicidad-. Felicidades Rin Dono, Len Dono y a todo el staf ¡Felicidades!

-¡¡Gracias Gakupo!! –Exclamaron todos los allí presentes-.

-Y tengo una gran noticia –Dijo Gakupo con una sonrisa de oreja a oreja-. Mañana en el escenario de Tokio, los Kagamine harán su aparición con su primera canción, ¡y la mitad de los boletos ya están vendidos!

-¡¡Woooow!! –Exclamarón todos y aplaudieron-.

-¡Eso es genial! –Exclamó Kaoru con su vaso de licor en mano-. ¡Mañana será un gran día!

-¡¡Yeeey!! –Exclamarón todos-.

-¿No es genial Len? –Preguntó con entusiasmo Rin-.

-¡Por supuesto que si, Rin! –Le dijo mientras entrelazaba sus manos con las de ella y se miraban de frente con una gran sonrisa en sus labios. Si bien, durante esas tres semanas su relación no había cambiado en nada, su cariño el uno por el otro aumentaba-.

-Rin Dono, Len Dono, ya es bastante tarde y mañana les toca un día bastante pesado. Será mejor que se vayan a descansar

-¡Ok Gakupo! –Exclamarón ambos-. Oyasumi Minna (Buenas noches a todos) –Dijeron despidiéndose-.

-¡Oyasumi Kagamine Rin Chan, Len Kun! –Se despidió el Staf antes de que ambos chicos comenzaran a dirigirse a la puerta y salieran por ella-.

-Gracias por todo tu esfuerzo Len –Dijo Rin tomándole la mano de un apretón tierno y temeroso-.

-Gracias a ti también Rin… -Susurró tiernamente mientras la veía a los ojos-

Si, finalmente los Kagamine harían su aparición y ambos estaban nerviosos. No sabían lo que les esperaría el día de mañana y temían que alguna equivocación les costara el cuello. Sin embargo… ¿Eran los Kagamine no? Si era así, no había de qué preocuparse, los Kagamine eran fuertes y alcanzarían la gloria cueste lo que cueste… Y teniéndose el uno al otro, la fortaleza no se alejaría de ellos dos.

5 comentarios:

  1. Yeyyy después de una gran lucha pude terminar el tercer capitulo. El siguiente quien sabe cuando lo voy a hacer, pero se viene genialoso!!!

    Espero que les haya gustado este capitulo (aunque nadie pasa por aquí a leerlo u.u)

    ¿comentarios?

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  2. :3 nanai Dx aunq para que pones a miku asi O_ò insolenta nomas xD ya cuidate ta lindo lo leo siempre que puedo :3

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  3. woooo aki!!! que bakan tu blog e are uno y haremos competencia jajja :P cudiate te exo d emeos y epsero verte pa verano =) bye bye !!

    att el maxito

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  4. mmmm....cuando sale el 4 , la curiosidad carcome mi mente........AAAAAAAAAAAAAAAAAA ( crisis sicotica) ...listo,me usta espero seguir leyendo
    Wiiiiiiiiiii

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  5. wenaaaaaaaaaaaaaaaaaaa.. wenaaaaaaaaa wenaaaaaaaaaaa. la mediaa pagina..
    me gusto laa historiaaaaaa..
    pero espectacularrsh...!!

    Te Adoro akiko :)


    bcn bcnn..! la amee

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